Imagen explicativa del Apocalipsis y el ataque a la iglesia por parte de las naciones, interpretación de la iglesia davidiana.
El Cristianismo más oscuro (Parte III)
Davidianos: ¿Secta peligrosa o víctimas de los prejuicios?
Davidianos: ¿Secta peligrosa o víctimas de los prejuicios?
En
1993 surge la noticia que mantuvo en vilo a los noticieros: Un grupo fanático
sectario relacionado con los Davidianos del Séptimo día, se han atrincherado en
la pequeña ciudad de Waco, Texas con armas y han tenido que intervenir las
fuerzas especiales de asalto. El trágico episodio se saldó con casi 90 muertos
por un incendio producido durante el ataque de las fuerzas del orden.
Visto
así parece otro suceso similar al de Guyana, pero en miniatura, se llegó a
informar que el incendio fue provocado como una manera de suicidio colectivo
por parte de los miembros del grupo. Después se aclaró que no fue así y que en
parte ese suceso fue un desafortunado cumulo de situaciones, manipulaciones
intencionadas e intereses que desembocaron en tragedia. Intentaremos desgranar
lo que realmente sucedió y por qué ese grupo, pese a protagonizar uno de los
más escandalosos episodios de violencia religiosa en estos últimos años,
todavía sobrevive, los miembros que salvaron la vida, tienen una respuesta muy
distinta a la que dieron las autoridades o llegó a la prensa. Intentaremos
aclarar la verdad de todo esto y entender cómo pueden llagar a suceder hechos
como estos en pleno siglo XX, en el país de las libertades.
Para
ello vamos a retroceder unos cuantos años, a los orígenes de este movimiento
religioso catalogado como apocalíptico y muy peligroso. El movimiento en
cuestión se originó en los años 30 a raíz de los escritos de un miembro de los
adventistas del séptimo día, llamado Víctor T. Houteff.
Víctor
T. Houteff, nació el 2 de Marzo de 1885 en la ciudad de Raikovo, Bulgaria,
pertenecía por nacimiento a la Iglesia ortodoxa búlgara, por aquella época
unida a la griega, en la que fue bautizado. Pero pasada la adolescencia se
enfrentó a las enseñanzas de la iglesia ortodoxa, a la que pronto abandonaría.
No queda claro lo que sucedió entonces, por un lado se menciona que tuvo
conflictos con miembros de la iglesia local, y con ciertos políticos, por otro
lado se habla que sufrió la persecución religiosa por parte de miembros
influyentes de la iglesia ortodoxa, eso no lo ponemos en duda, es bien conocido
el carácter poco tolerante de las iglesias griega y búlgara; según otras
fuentes se trataba de persecución religiosa pero utilizada como pretexto para
ocultar ciertas cuestiones monetarias, políticas y cierta envidia por parte de
algunas personas que a su vez eran influyentes miembros de la iglesia ortodoxa,
debido a ciertos negocios exitosos que el joven tenía en la frontera con
Adrianopolis, que para ese tiempo pertenecía al odiado imperio otomano, de allí
que algunos políticos influenciados por estos, también le pusieran las cosas difíciles
al joven Houteff. Por ello en el año 1907 decide emigrar a los EEUU, para abrirse
camino y huir de las dificultades que atravesaba su vida en Bulgaria. Fue así como se establece en Illinois, donde
trabaja en un hotel de la ciudad y más tarde como mozo de almacén en un
establecimiento comercial. Estando allí fue como contacta con una familia de
adventistas del Séptimo día y se empieza a interesar por sus enseñanzas,
llegando a bautizarse como tal en 1919 en Rockford, Illinois.
Por
motivos personales se trasladó en 1923 a Los Ángeles, California, donde hizo
progresos dentro de la iglesia adventista en la iglesia de la calle Hoover,
conocida como el Tabernáculo. De hecho, años más tarde sirvió allí como
asistente del director de la escuela sabática y más tarde el mismo fue Maestro
de dicha escuela. Según parece fue desde 1929 cuando sus clases en la escuela sabática
se tornan más complejas y empieza a pronunciarse sobre el tema de los 144.000
mencionados en el libro bíblico de Apocalipsis capitulo 7 y 14 y es entre otras
cosas por la interpretación que da a ese grupo por lo que termina rompiendo con
la iglesia adventista.
Los 144,000 en la Biblia
Esa
cifra, de la que tan solo se hace mención en dos ocasiones en la Biblia, ha
sido estudiada e investigada en las últimas décadas del siglo XIX y las primeras
del XX por numerosos grupos religiosos surgidos en ese tiempo. Vale la pena
hacer un repaso a las citas, para entender el porqué de la polémica. Así se
habla de estos en el capítulo 7: Y miré a otro ángel subiendo del oriente
que tenía el sello del Dios vivo, que llamó en alta voz a los cuatro ángeles, a
quienes les había sido permitido que hicieran daño a la tierra y al mar,
diciendo: ¡No dañen a la tierra, ni al
mar, ni a los árboles, hasta que pongamos un sello en la frente de los siervos de
nuestro Dios! Luego escuché el número de los que habían sido sellados: ciento
cuarenta y cuatro mil sellados de todas las tribus de los hijos de
Israel.(....)
Después
de esto miré, y he aquí una gran
multitud, la cual nadie podía
contar, de todas naciones y tribus y
pueblos y lenguas, que estaban delante
del trono y en la presencia del Cordero,
vestidos de ropas blancas, y con
palmas en las manos; y clamaban a gran voz, diciendo: La salvación pertenece a nuestro Dios que
está sentado en el trono, y al Cordero.
Y todos los ángeles que estaban en pie alrededor del trono, y de los ancianos y de los cuatro seres
vivientes; y se postraron sobre sus
rostros delante del trono, y adoraron a
Dios, diciendo: Amén. La bendición y la gloria y la sabiduría y la
acción de gracias y la honra y el poder y la fortaleza, sean a nuestro Dios por los siglos de los
siglos. Amén.
Entonces uno de los ancianos habló, diciéndome:
Estos que están vestidos de ropas blancas, ¿quiénes son,
y de dónde han venido? Yo le dije:
Señor, tú lo sabes. Y él me dijo: Estos son los que han salido de
la gran tribulación, y han lavado sus
ropas, y las han emblanquecido en la
sangre del Cordero. Por esto están delante del trono de Dios, y le sirven día y noche en su templo; y el que está sentado sobre el trono
extenderá su tabernáculo sobre ellos. Ya no tendrán hambre ni sed, y el sol no caerá más sobre ellos, ni calor alguno; porque el Cordero que está
en medio del trono los pastoreará, y los
guiará a fuentes de aguas de vida; y
Dios enjugará toda lágrima de los ojos de ellos. (Apocalipsis 7:2-17).
Se puede notar la mención de dos
grupos bien diferenciados, los que forman parte de esos 144,000 y luego los de
una gran multitud, a los primeros se le menciona como elementos claves para el
fin, pues se dice que se retengan los cuatro ángeles de destruir, hasta que se
sellen a todos. Después se habla de esa gran multitud de incontable cantidad
que parece sobrevivir a la destrucción de esa “Gran Tribulación”, pero no se
menciona que sean los mismos sellados. En la segunda mención del
primer grupo de 144,000 se dice los siguiente: Y ¡mire!, y, he aquí, el
Cordero estaba en pié sobre el monte de Sión, y con él ciento y cuarenta y
cuatro mil, que tenían el nombre de su Padre escrito en sus frentes. Y oí una
voz del cielo como ruido de muchas aguas, y como sonido de un gran trueno; y oí
una voz de tañedores de arpas que tañían con sus arpas; Y cantaban como una
canción nueva delante del trono, y delante de los cuatro animales, y de los
ancianos; y ninguno podía aprender la canción, sino aquellos ciento y cuarenta
y cuatro mil, los cuales fueron comprados de entre los de la tierra.
(Apocalipsis 14:1-3)
La
mayor parte de los grupos religiosos de la cristiandad piensan que esta cifra
de 144,000 sellados es un número simbólico que representa a la iglesia en su
totalidad, tanto la iglesia católica como la mayoría de los movimientos
protestantes lo entienden así. Se dice
allí que son tomados o comprados o escogidos de entre los humanos que habitan
la tierra, para indicar que su nueva ubicación será otra, la celestial, de tal
manera que todos tienen esperanza de ir al cielo, tal como se menciona que será
el camino que tomen los 144,000. Sin embargo dentro de los movimientos
alternativos hay discrepancias en esto, sobre todo si observamos ciertos
matices. Algunos como la llamada Iglesia de Dios, fundada en 1863, quienes a través
de su revista The Hope of Israel (La Esperanza de Israel), han enseñado que se
trataba solo de cristianos que provenían del judaísmo y que fueron escogidos en
los primeros tiempos del cristianismo. Los cristadelfianos, otro grupo que como
vimos entienden la salvación a través de los israelitas naturales, interpretan
este número de manera similar, con algunos pequeños matices, pues hablan de
estos como las primicias en la resurrección, pero también haciendo referencia a
los judíos naturales, el apoyo para esta creencia la encuentran en el hecho de que en ese mismo capítulo al
detallar los sellados hace mención de las tribus de Israel. Aunque una mirada más
al detalle nos hace ver que hay una clara discordancia entre las tribus
naturales que tuvieron territorio dentro de Israel natural y las que se
mencionan en términos proféticos, así como Ezequiel al hablar proféticamente
del santuario simbólico, hace mención de un numero de tribus distinto al de las
tribus históricas y el libro de Apocalipsis también hace lo mismo, sustituyendo
una por otras, lo cual hace pensar que en profecía al hablar de tribus de Israel,
expresión debe ser considerada simbólica y no literal. Por ello muchos hablan
de que el Israel mencionado en la profecía tiene que ver con un Israel
espiritual, haciendo referencia a la congregación o iglesia cristiana.
Sin embargo, el hecho de que después de ese grupo se hable de otro como
una gran muchedumbre o multitud que pasarán vivos y habitarán la tierra, tras
la llamada “Gran tribulación”, ha creado también controversia. Para algunos
esta multitud se refiere a los mismos, simplemente desde diferentes puntos de
vista. Pero cabe destacar que en una profecía paralela del mismo libro bíblico,
se da a entender que estos vivirán en la tierra. Así se puede concluir al leer esta porción: Y
vi un cielo nuevo y tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra
desaparecieron; y ya no había mar. Ahora, pues, yo, Juan, vi la ciudad santa,
la nueva Jerusalén , descender del cielo por la mano de Dios, compuesta, como
una novia engalanada para su esposo. Y
oí una voz grande que venía del trono, y decía: Ved aquí el Tabernáculo de Dios
entre los hombres, y el Señor morará con ellos. Y ellos serán su pueblo, y el
mismo Dios habitando en medio de ellos será su Dios. Y Dios enjugará de sus
ojos todas las lágrimas; y no habrá ya muerte, ni llanto, ni alarido, ni habrá
más dolor, porque las cosas de antes son pasadas. (Apocalipsis 21:1-4).
Aquí, el apocalipsis nos habla
de un nuevo sistema de cosas, se menciona claramente a tierra, la morada de los
hombres, hacia donde dice que de alguna manera bajará la Nueva Jerusalén y en
cierto sentido Dios plantará su tabernáculo espiritual en la tierra. En
el capítulo 7 ya mencionaba que Dios extendería su tabernáculo sobre la gran
multitud y que las lágrimas de sus ojos serían limpiadas en el sentido de
librarles del sufrimiento. Y ahora se menciona a los moradores de la tierra,
recibiendo bendiciones, entre otras la extensión de su tabernáculo o tienda
antes citada y el limpiado de las lágrimas de los ojos, en claro paralelo a las
bendiciones recibidas por la Gran multitud de Apocalipsis 7. Por lo cual es
lógico concluir que en ambos relatos se hace referencia al mismo grupo,
claramente diferenciado de los 144,000 sellados y comprados de la tierra para
vivir en el cielo con Cristo. No cabe duda que esta gran multitud y la diferencia
entre este grupo y los 144,000 no ha sido debidamente explicada por la mayoría
de las iglesias, con la excepción de los Testigos de Jehová, quienes pronto
añadieron a su teología, la enseñanza de un grupo de elegidos de entre la
tierra que compondrían ese grupo de 144.000, con el fin de gobernar con Cristo
en los cielos o Sion Celestial y la gran multitud que se trata de cristianos
fieles también, pero con esperanza terrenal, pues ellos al igual que los
cristiadelfianos creen en una esperanza de vida eterna en la tierra, la
diferencia es que para los cristadelfianos, esto indica a las claras que desde
Sion literal se gobernará el mundo paradisiaco futuro, por ello la referencia a
la nueva Jerusalén que baja del cielo a la tierra.
En
el caso del adventismo la identificación de este grupo de 144.000 ha sido una
cuestión que ha suscitado no poca controversia y ansiedad, la misma Ellen G.
Withe dijo al respecto: No es su voluntad que entren en controversia por
cuestiones que no los ayudarán espiritualmente, tales como: ¿Quienes serán los
144.000? Fuera de duda esto lo sabrán dentro de poco los que sean elegidos de
Dios (Mensajes selectos - Ellen G. Withe Vol. 1 Pág. 205). Sin
embargo en el fondo, pensaban que se trataba de la iglesia al completo o parte
de ella, en la revista Review and Herald en 1905, hacía un llamamiento así: Esforcémonos
con todo el poder de Dios para estar entre los 144,000. (Review and Herald,
Marzo 9, 1905)
Bien
pues de alguna manera Víctor Houteff creía que la década de los treinta era el
momento adecuado para la identificación de ese grupo y el momento del sellado
completo de estos, conocidos también como el rebaño pequeño, los escogidos, las
primicias, se estaba acercando. El empezó a afirmar que aquellos 144,000 serían
los primeros en encontrarse con Cristo en el cielo, como primicias, para luego
dar paso a los resucitados de todos los tiempos, que serían la gran muchedumbre
o gran multitud de Apocalipsis 7:14. Sin embargo no deja claro cuál será el
camino a seguir por estos últimos, si el cielo o la tierra.
Lo
que si tenía claro es que ese recogimiento de los escogidos no se había dado en
el primer siglo solamente, sino en estos últimos días, como apoyo, busca en las
profecías de Ezequiel, datos que le llevan a esa conclusión. Así por ejemplo
citando de Ezequiel 4 donde se dice lo siguiente: Yo te he dado los años de
su maldad por el número de los días, trescientos noventa días; y llevarás la
maldad de la casa de Israel. Y cumplidos estos, dormirás sobre tu lado derecho
segunda vez, y llevarás la maldad de la casa de Judá cuarenta días; día por año
día por año te lo he dado." (Eze. 4:5, 6.) Esta presentación profética efectuada por
el profeta en forma física, estaba relacionada con el destino de la casa de
Israel (el reino de diez tribus), y Judá (el resto de dos tribus de sur), y
representaban la cautividad entre los gentiles, lejos de su patria. En ese
sentido el profeta, mientras se acuesta en su lado izquierdo representaría la
casa de Israel en su iniquidad por un periodo de 390 años, y que mientras se
acuesta en su lado derecho representa la casa de Judá en su iniquidad por un
periodo de 40 años. Para este mensaje profético Houtteff da la siguiente
aplicación posterior: El hecho de que el pueblo de Dios desde 1930 ha estado
recibiendo un siempre creciente suplemento de pura (Divinamente revelada)
verdad en las manos de uno, es evidencia en sí que no solo el inmundo banquete
y los 390 años han terminado, sino que también los 40 años de ayuno. No hay más
necesidad, por consiguiente, para que alguien subsista con pan cocido sobre
excremento humano, o ayune. Ahora, restando los 430 años de 1930 D.C., tenemos
1500 D.C., el tiempo que el Espíritu movió a efectuar la Reforma Protestante. Y
como los granos (doctrinas) contaminados estuvieron durante los 390 años
dispensados a las congregaciones Protestantes, y como el ayuno de 40 años
(ausencia de Verdad progresiva) ocurrió en la Denominación Adventista del
Séptimo Día, dos verdades sobresalen claramente: primero, que los Protestantes
en este simbolismo son denominados la "casa de Israel"; y segundo,
que los Adventistas del Séptimo Día son denominados "la casa de
Judá." Así la división que Dios trajo. (La Vara del Pastor Vol. 1, 84).
Esquema explicativo aparecido en la obra de V. Houttef , "la Vara del Pastor"
Esto
es un ejemplo de una común costumbre del adventismo, aplicar el cumplimiento de
las profecías a momentos específicos de su historia, presumiéndose así ellos
mismos de ser los verdaderos cristianos. Houteff desarrolló su pensamiento a
través de una serie de libros y ensayos que escribió, entre ellos "La Vara
del Pastor", a los cuales el llamó: El Código Simbólico, puesto en
circulación sobre todo a partir del año 1930. En estos escritos el realiza una
interpretación de algunas profecías bíblicas como el sellamiento en Ezequiel 9,
los 144.000 de Apocalipsis 7 y 14, La siega de Mateo 9 y 13 y Apocalipsis 14,
el mensaje de los jinetes de Zacarías 6, La Bestia Semejante a un leopardo de
Apocalipsis 13 y otras. Según la interpretación de Houteff existe un
paralelismo entre lo que ocurrió al antiguo pueblo de Israel desde que Dios lo
sacó de Egipto y lo que ocurre con la Iglesia Adventista del Séptimo Día en el
tiempo previo a la Segunda Venida de Cristo.
El
problema es que todas esas interpretaciones no fueron aceptadas por el consejo
dirigente de la iglesia adventista, y por ello se inició una serie de
discusiones en el seno de la iglesia que concluyó con la expulsión de Víctor
Houteff de la misma, rechazando todas sus interpretaciones proféticas, pese a
llevar una línea argumental similar a la de Ellen G. Withe.
Pese a la oposición y el rechazo a sus ideas,
este continuó con su labor siguió dando publicidad a “La vara del Pastor”, del
cual en 1932 publica un segundo volumen en el que hace un estudio profundo
sobre el libro de Apocalipsis y Daniel. Su mensaje empieza a calar entre los
del séptimo día, hasta el grado de que cientos de adventistas le siguieron, pese
a que al principio él no los animaba a abandonar el adventismo tradicional. En
realidad la ruptura total con la Iglesia Adventista del Séptimo Día, no llegó
hasta los años cuarenta, entre los años 1942-43, durante la guerra, debido a
las mismas razones por las que ya se había dividido anteriormente la iglesia
adventista, el asunto de la neutralidad. Los seguidores de Houteff se oponían a
todo servicio militar, incluido el servicio civil, como el de enfermería o
elaboración de trajes militares u otros servicios auxiliares, en ese sentido
actuaban en imitación de los Testigos de Jehová, quienes destacaban como los más
intransigentes pacifistas y los más firmes en su neutralidad absoluta ante la política
o lo militar.
El
dilema de los seguidores de Houteff, era que para poder recibir del gobierno de
EEUU, la opción de ser eximidos del servicio militar, debían representar a una
religión que tuviera en sus estatutos ese punto de vista, se vieron por ello en
la obligación de separarse del adventismo, quienes daban vía libre a cada uno
de sus miembros en ese tema. Así desde entonces se conocieron como la
Asociación General de Davidianos Adventistas del séptimo día. Desde entonces
ellos conocen a la iglesia adventista tradicional, como la iglesia de Laodicea,
por aquello de la iglesia repudiada del Apocalipsis. Años atrás desde 1935
había establecido su cede en una pequeña población de Texas, llamada Waco,
desde donde se dirigía a la iglesia davidiana, que ya en los años cincuenta contaba con
seguidores en EEUU, Canadá, Gran Bretaña y Australia. El nombre de davidianos
procede por el hecho de considerarse espiritualmente herederos de la línea del
rey David y de sus promesas.
Poco
después de la muerte de Houteff, ocurrida en 1955, su esposa, Florence Houteff.
, es nombrada la líder espiritual, cosa con la que algunos no estuvieron del
todo de acuerdo, entre ellos Benjamín Roden. En 1959 ocurre una fractura del
grupo surgiendo un nuevo grupo que no reconoce la autoridad de Florence Houteff
y estos llegan a autodenominarse "La Rama Davidiana", y como no, es
elegido como nuevo líder de la organización Benjamín Roden quien lidera el
grupo hasta su muerte en 1978. Mientras
la iglesia Davidiana continuó creciendo separada de esta, llegando a alcanzar
casi los cinco millones de miembros. En algunos países se les conoce como La
Vara del Pastor, pues el nombre davidianos ha llegado a tener connotaciones
negativas.
La Rama de los Davidianos de Waco
En
cuanto a la rama de los davidianos, también establecidos en Waco, de nuevo
surgió otra ruptura, esta vez cuando Benjamín Roden muere en 1978 y deja el
puesto a su esposa Lois Roden. Parece que la historia se repite y de nuevo las
intrigas familiares y las envidias, celos y otro tipo de artimañas, oscurecen
el camino a seguir de los davidianos, esta vez de la llamada Rama Davidiana. La
ideología y el sentido del movimiento se hace cada vez más apocalíptico y
centrado en la interpretación profética, abandonando otras cuestiones
tradicionales de los adventistas. Al morir Lois, el hijo de esta George Roden
toma el mando, pero no sin la oposición de otro líder de gran carisma dentro de
los davidianos, Vernon Howell, quien disputó con este sobre el establecimiento
de la sede en el llamado Monte Carmelo, se dice que la enemistad entre ambos líderes
llegó al extremo de llegar a las balas entre ambos, parece ser que para ese
tiempo ya se habían olvidado del pacifismo y el rechazo a las armas que había
instaurado Houteff. El suceso ocurrió debido a la gran competencia que surgió
entre ambos, George Roden desafió a Howell a una prueba en la que quería
demostrar que él tenía poder para levantar muertos, llegando a exhumar un
cadáver para demostrar su supremacía espiritual. Howell fue a las autoridades
con una acusación contra Roden por exhumar ilegalmente un cadáver, pero debido
a que pidieron pruebas que él no pudo aportar. Howell planeo la forma de buscar
que Roden fuera procesado criminalmente, para ello consiguió que siete
seguidores armados intentaran conseguir la prueba fotográfica de aquello. El
grupo de Howell fue descubierto por Roden y entonces surgió un tiroteo. Cuando
el sheriff llegó, Roden ya había sufrido una herida de bala. Como consecuencia
del incidente, Howell y sus seguidores fueron acusados de intentado asesinato,
pero por alguna razón el juicio no prosperó.
No
obstante George Roden perdió la razón y en una ocasión asesinó a hachazos a un
hombre, alegando que este había sido enviado por Howell para matarle. Fue
detenido, pasando algunos años en prisión, hasta que en 1998 un tribunal lo
declaró demente y pasó el resto de sus días en un hospital para enfermos
mentales. Mientras, aprovechado la caída
en desgracia del último Roden, Vernon Howell toma las riendas de la iglesia e
inicia un camino de fanatismo y paranoia extrema.
Vernon
Howell, más conocido como David Koresh, nace en Agosto de 1959, fruto de una
familia desestructurada, su padre Bobby Howell, abandonó a su madre antes de
nacer el joven Vernon. En 1963 le deja al cuidado de su abuela materna, hasta
que se casa con un carpintero alcohólico y lo lleva a vivir con ellos. Al
parecer sufre de acoso, violaciones por parte de jóvenes del barrio y el
resultado es un joven conflictivo y de vida desordenada, hasta que algo le hizo
cambiar, cuando se topa con unos cristianos de la iglesia bautista del sur,
donde según reconoce se reencontró con Cristo. Si bien para ese tiempo su madre
se había hecho adventista y por ello la acompaña a la iglesia. Se enamora de la
hija del pastor, y aquí es donde empieza a tener delirios de iluminado, pues él
afirma que mientras rezaba para conseguirla abrió sus ojos y según dice
encontró la Biblia abierta en Isaías 34:16 donde dice: no dejen de tener
cada cual su compañera; convencido de que esto era un signo de Dios, él se
acercó al pastor y le dijo que Dios quiso que él tuviera a su hija como esposa.
A pesar de la oposición del pastor, este insistió en conseguirla para sí, hasta
que fue expulsado de la iglesia por el pastor, quien no veía a Vernon como
alguien equilibrado mentalmente.
En
1981 se mudó a Waco, Texas, donde se unió a la Rama de los Davidianos, donde es
aceptado y pronto hace progresos, al parecer sus discursos son llamativos y
atraen a numerosos seguidores dentro de los davidianos. También hace sus
pinitos en la música rock religiosa y con ello se convierte en un personaje
popular entre la juventud. Por ello cuando George Roden es encerrado en
prisión, no duda en posicionarse como sustituto y así consigue liderar una
iglesia que pretende renovar.
En
primer lugar, decide cambiar legalmente su nombre por el de David Koresh, el
nombre David porque se consideraba descendiente del rey bíblico David, de quien
descendió el mesías. En cuanto a lo de Koresh, al parecer era una transcripción
inglesa de Cyrus, el rey persa que liberó a Israel de la opresión de Babilonia
y lo devolvió a su tierra. Algunos vinculan el término el nombre Cyrus o Koresh
con el del mesías, pues en la Biblia se habla de Cyrus como el rey ungido. La interpretación
errónea que desde fuera se dio, fue el que se dijera que Koresh se consideraba
el Cristo o el mesías ungido, algo así como si fuera Dios, cosa que no era
verdad de ninguna manera. Ese era el propósito de Koresh, hacer que los
davidianos salieran totalmente del mundo en el que se consideraban prisioneros
y fueran liberados. Todo por supuesto en sentido espiritual. Sin embargo,
cuando la Biblia anima a salirse de Babilonia, lo hace en el sentido de
limpiarse de la contaminación espiritual y moral de esta. Koresh sin embargo,
si bien los quiso alejarse de las doctrinas tradicionales, sin embargo hay
serias dudas sobre su actitud moral, sobre todo en lo relacionado con el sexo.
Si bien no fue él quien introdujo de una especie de poligamia encubierta dentro
de los davidianos, fue George Roden, sin embargo el la promovió. Además de haber acusaciones contra él
relacionadas con relaciones sexuales con adolescentes, que los davidianos
aseguran eran consentidas, pero no por ello dejaban de ser delitos en las leyes
estatales. Según parece algunos de ellos había perdido a sus novias y mujeres
porque estas se unieron a él. Por ello muchos miembros habían abandonado el
movimiento y se habían postulado como enemigos acérrimos, guardando un
resentimiento fanático y dispuestos a verter cualesquier acusación, aun siendo
calumniosa contra Koresh.
Debido
en parte a esto y a que se granjeo la enemistad de algunos seguidores de Roden,
David Koresh no se sentía seguro, de hecho temía que en cualquier momento lo
fueran a matar. Por ello se dice que se empezó a coleccionar armas a gran
escala, según parece legalmente a través de ciertos miembros de la iglesia que renegaban
una armería. Además en el rancho del Monte Carmelo, en Waco, donde se
estableció, incitó a que muchos de sus seguidores a que vivieran en comunidad,
algo realmente sospechoso para las autoridades, sobre todo por tratarse de un
grupo religioso y dado el recelo que se tenía hacia movimientos comunales desde
los sucesos de Guyana. Por otro lado, sus sermones de Koresh empezaron a llamar
la atención, sobre todo por tratarse de menajes apocalípticos, que anunciaban
la pronta destrucción del mundo, y un panorama de final inmediato con tintes de
castigo divino, invitando a la gente a que se salvara siguiendo su camino.
El camino a la catástrofe
En
los primeros años de la década de los 90, se dieron varias circunstancias, que
hicieron que todo el movimiento desarrollado en Waco, desembocara en una catástrofe.
Algunos de los ex miembros se habían unido en torno a Marc Breaut, un anterior líder
del grupo y que ahora se postulaba como el mayor enemigo del movimiento de
Koresh. Empezó a lanzar acusaciones, muchas de ellas infundadas sobre supuestos
sacrificios de niños, violaciones, prácticas depravadas, etc. El problema es
que nunca se pudieron demostrar ante la ley ese tipo de violaciones y en cuanto
a ciertas prácticas sexuales, dado que al parecer eran con el consentimiento de
quienes lo practicaban y en todo momento se demostró que eran mayores de edad,
la justicia ordinaria poco podía hacer al respecto.
La
CAN, una muy importante asociación anti secta americana, famosa por los
secuestros para practicar las supuestas desprogramaciones de sectarios, también
tuvo un papel crucial en el desenvolvimiento de los sucesos de Waco. Si bien
había un desconocimiento total entre los expertos de dicha asociación con
respecto a los davidianos, sin embargo lograron contactar con una familia que
solicitó sus servicios y actuaron en un caso, el de David Block, quien había
aceptado someterse a una desprogramación voluntaria, como le llamaban ellos al
proceso. Es muy extraño que pueda haber una desprogramación voluntaria, cuando
el propio termino “desprogramación”, da por hecho que la mente del individuo no
puede actuar por voluntad propia, sino que está programada por el líder de la
secta y por lo tanto, si es voluntaria deja de ser una desprogramación en el
sentido estricto de la palabra, siempre aceptando que realmente se pueda
programar o desprogramar el cerebro externamente, algo que científicamente no
está probado, como se indicó en el capitulo relacionado con los grupos anti
secta. En cualquier caso, el supuesto experto Rick Ross y el supuestamente
desprogramado David Block, a partir de entonces se sumaron a los ataques contra
Koresh y sus seguidores. Iniciaron denuncias sobre un supuesto arsenal de armas
que almacenaba Koresh en Monte Carmelo, entre otras cosas hablaban la tenencia
de ametralladoras, y otras armas modificadas, sumamente peligrosas. También
insistieron en el abuso de menores y actos deshonrosos y conducta depravada,
pero de nuevo, faltaban las pruebas y en el caso de las armas, si bien el
comisario del condado visitó e hizo investigación en el rancho del monte
Carmelo, no encontró el supuesto arsenal, si bien es verdad que Koresh y otros
miembros del grupo tenían armas, pero todas ellas legales con sus
correspondientes permisos. Así que de nuevo, nada pudo hacer la justicia contra
Koresh, ni los davidianos, por muy tenaces que fueran los de la CAN.
Luego
entró en escena el organismo llamado ATF (oficina de alcohol, Tabaco y Armas),
un organismo que para el año 93 temía que podía ser disuelto, pues el gobierno
pretendía ahorrar en instituciones y hacer ciertos recortes presupuestarios en
esa materia y estaba en mira el trabajo innecesario de la ATF. De alguna manera
llegó a oídos de la agencia las acusaciones que tanto CAN, como Breaut y los
suyos tenían contra los davidianos de Waco. Los expertos de la ATF, recabaron
informes extraídos de ambas fuentes a fin de tener algo de que acusar a Koresh
y desmontar lo que podía ser una secta muy peligrosa y violenta. Si bien lo más fácil hubiera sido detener a
Koresh en las muchas salidas que hacía libremente a la ciudad y acusarlo de
algo, después solo se trataría de registrar el centro del monte Carmelo y
listo, se hubiera evitado con ello el catastrófico desenlace. Pero, por un lado
no disponían de pruebas directas que lo incriminaran, los delitos por los que
podían acusarle más directamente, abuso de menores, no era de su competencia y
las pruebas eran poco consistentes. Necesitaban algo sonado y que tuviera gran
repercusión mediática, para parecer una agencia útil; por lo tanto el asunto de
las armas era el pretexto que debían usar, pero no solo ese, debía haber algo
más. Por ello se basaron en la antigua acusación de David Block y la CAN, sobre
el arsenal de armas, la modificación de armamento ilegal y añadieron a eso que
los davidianos tenían un laboratorio para la producción de drogas. Imposible
saber de donde surgió esa increíble acusación, pero consiguieron que el juez
les diera la orden de allanamiento que necesitaban.
Así
fue como en la mañana del 28 de Febrero de 1993, sin previo aviso o
advertencia, se presentaron ante el rancho y sin mediar palabras se inicio un
tiroteo. Según la versión oficial, los hombres de Koresh abrieron fuego sin
avisar, pero por el testimonio de muchos sobrevivientes, fueron los guardias
los que iniciaron el ataque. El grupo de Koresh en vez de sencillamente
rendirse y pacíficamente abrir las puertas a los de la ATF y demostrar la
falsedad de las acusaciones, pensaron que tenían que defenderse como pudieran y
repeler con las armas el ataque a fin de defender a las mujeres y los niños de
lo que ellos pensaron que era el ataque de los enemigos satánicos que
pretendían matarlos a todos. Así dispararon convencidos quizás por las arengas
del líder que lo hacían en defensa propia.
Así
en esa primera refriega, murieron varios davidianos y otros tantos guardias de
asalto. Koresh por otro lado intentó negociar un alto el fuego, tampoco
pretendía morir defendiendo su posición, por muy fanático que fuera, pero
estaba claro que los de la ATF no querían negociar, tan solo apresar a la
fuerza a Koresh y tomarlo como trofeo. Hasta que no acabaron las municiones los
de la ATF, no acabó el fuego. Después, tras el fracaso de ese primer intento y
ya bajo las cámaras y los focos de los medios, se pidió ayuda al FBI, quienes
tampoco hicieron las cosas de forma acertada, pues en vez de buscar la ayuda de
psicólogos o expertos negociadores, buscaron el consejo de los expertos de la
CAN, que tan solo se reiteraron en sus acusaciones de peligrosidad y de
crueldad de Koresh. La noticia que corrió en los medios era de otro caso
similar al de Guyana, pero esta vez se iba a evitar ese desenlace.
El
método para hacerlos ceder, no podía ser más cruel, colocaron música a fuerte
volumen, a fin de estresar los amotinados, potentes focos fueron dirigidos
hacia el lugar durante la noche para evitar el descanso de estos y agotarles moralmente. Francotiradores apuntaban al paso de hombres
con sus características vestimentas a los cuales disparaban sin piedad. Además
se lanzaban gases actualmente prohibidos por todas las legislaciones y que eran
arrojados al interior del rancho. Como buenos sitiadores, no dudaron en
cortarles los suministros como la luz, el agua y la llegada de alimentos, tal
como hicieron en su momento los cruzados de Inocencio III en su particular
guerra contra los cátaros. ¡Cuantas veces se ha repetido la misma historia!
Dentro
del centro, Koresh, quien creía que Dios vendría a rescatarles, animaba a los
suyos a esperar, era el día del juicio final que tanto habían esperado, no
podían rendirse ni entregarse al enemigo, pues Dios les daría la victoria, con
ese mensaje apocalíptico mantuvo el ánimo de sus discípulos intacto. Sin
embargo hubo algunos davidianos que pidieron ayuda de personas ajenas a los
sitiadores, colocando pancartas mostrando que eran inocentes y que las
acusaciones eran infundadas.
Así
pasaban las semanas, hasta 51 días sin resultado, parece ser que los davidianos
tenían víveres suficientes para aguantar un largo asedio. Hasta que la
paciencia de los jefes del FBI llegó a su final y decidieron actuar de forma
fulminante. En un imparable ataque, lograron derribar algunos muros que
rodeaban el rancho y pudieron introducir unidades bien pertrechadas dentro,
como si se tratara de una guerra. Al
parecer se volcaron varios camiones o tanquetas utilizadas para atravesar los muros y el
combustible derramado, unido a los disparos provocó un incendio y la muerte de
entre 86 personas, entre ellos 17 niños, muchas mujeres y el líder del grupo,
David Koresh, todos calcinados.
En algunas de estas fotos, se puede observar tanquetas del ejercito entrando en el rancho ardiendo. Un misterio sin resolver es como se originó el incendio, una versión afirma que fue Koresh y otra que fue provocado por derramamiento de combustible que en los enfrentamientos explotó.
bomberos ni ambulancias para auxiliar a los heridos o evitar el catastrofico resultado, teniendo en cuenta que dentro había mujeres y niños, que acabaron siendo victimas de la masacre.
Lógicamente
ante los medios de comunicación, se informó que Koresh había animado a hacer un suicidio
colectivo y fueron ellos los que provocaron el incendio. Los sobrevivientes,
muchos de ellos juzgados y puestos en libertad posteriormente por falta de
pruebas, niegan dicho acto y acusan a las autoridades del incendio.
Este
trágico suceso ha sido una demostración del daño que grupos de su`puestos expertos anti desta llenos de
prejuicios y recelos pueden lograr, unido a la torpeza y los intereses
personales y económicos de los poderes públicos y al fanatismo de algunos movimientos
religiosos que abandonan su pacifismo y sus formas originales para distorsionar el sentido
cristiano y el rumbo de su movimiento.
Todavía sobreviven muchos miembros
fieles de la Rama de los davidianos, prueba que no dependían tanto de su líder
como pensaban los “expertos en sectas” y siguen poniendo flores en el monte
Carmelo en lo que se ha convertido en un santuario del recuerdo que los ha
convertido en mártires del prejuicio.
Otros
movimientos religiosos en torno al los davidianos, como los Davidianos del Séptimo
día, prefieren ser conocidos como los de la Vara del Pastor, a fin de que aquel
nombre ahora maldito de davidianos, no sea utilizado contra ellos por lo
peyorativo de su significación actual, ni sean confundidos con aquel inmolado movimiento
famoso por el incidente de Waco.
Me gustaría obtener una copia de esta historia. Me es muy útil ya que tenemos problemas con este grupo extremista en nuestra iglesia. Ellos reparten su material para engañar y confundir a la nuestro hermanos Adventista. Como podría obtener una copia?
ResponderEliminarTodo esto está contenido en el libro "El trigo ahogado tomo V", algunas explicaciones más profundas sobre lo sucedido en Waco también lo encontrará en el libro "final en llamas" de J. Gordon
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